Después de una primera sesión celebrada en mayo, el Comitè d’Ètica Assistencial de BCN Salut Mental se reunió el jueves 20 de junio, también en la Casa Groga y a petición del Servei d’Inserció Laboral de la Fundación, para continuar abordando y compartiendo dilemas éticos en el marco de los servicios de inclusión laboral. La sesión se hizo con la incorporación de la mirada en primera persona de Albert Piquer, presidente de Federació Veus.

En una presentación inicial, Piquer describió el cambio, también en ámbito laboral, inherente en el despliegue de los Quality Rights dentro de la actual Convención de Derechos de las Personas con Discapacidad (CDPD). En este marco Piquer también explicó la apuesta de la Federació Veus por el trabajo con apoyo y en igualdad de derechos y no del trabajo protegido en centros especiales de trabajo. También subrayó que paradójicamente, pese a la centralidad social otorgada al trabajo como esfera de inclusión y relaciones, las condiciones del lugar son uno de los orígenes principales de malestar emocional y una rémora para combatir el estigma.

Los dilemas iniciales planteados por el Servei d’Inserció Laboral para iniciar el debate fueron dos: qué ocurre cuando una persona atendida se interesa por ofertas con alto componente de precarización y qué hacer cuando la valoración técnica desde los servicios no se adecua con la demanda de la persona. Durante una hora, el intercambio de experiencias puso de relieve el auge de ofertas en entorno protegido y en empresas con ánimo de lucro, por los menores costes salariales comparativos después de subirse el salario mínimo.

Otro elemento reiterado, también como una oportunidad, es la falta de cultura y de implicación empresarial tanto para favorecer el bienestar emocional en el lugar de trabajo como a la hora de convertirse en vector de inclusión en salud mental, como ocurre en el entorno a la discapacidad física. Se señaló también las dificultades de traducir conceptos de modelo nacidos en un marco anglosajón con mayor rotación en los trabajos y otra cultura de movilidad laboral. Como consecuencia, se apuntó que son necesarios todavía cambios legislativos en el ámbito laboral para facilitar los cambios y, también, visibilizar las disonancias colectivamente y desde las entidades.

En el acto participaron 20 personas provenientes de todas las entidades de BCN Salut Mental y contó con todo el equipo del Servicio de Inserción Laboral de la Fundación y también con la participación de Marisa Rosa y Lluïsa Terrades por parte del Patronato de la Fundación. Un tercer encuentro de la CEA, en julio, permitirá extraer conclusiones de los aspectos tratados y explorar propuestas de mejora conjuntas en el sector.